En medio de la crisis: una estrategia de 2,900%
(Traducido y Adaptado de Nickolai Hubble. The Daily Reckoning Weekend Edition)
Según Bloomberg, el gerente de un Fondo de Inversión, ha venido utilizando una “estrategia de cartera” permanente que le ha permitido convertir activos con un valor de $52 millones en 2001, en $15,6 billones apenas 10 años más tarde. Eso es el equivalente de convertir $1.000 en $30.000
¿Es que los banqueros en el mundo no aprendieron su lección de la crisis del 2008?
Sí, seguro que aprendieron la lección; y saben que cuando se meten en problemas financieros pueden esperar al Gobierno que los saque de apuros. Es por ello que hoy siguen haciendo exactamente lo mismo.
Pero cuidado: ¿esperan exactamente la misma solución, que todos sabemos no es solución?
Prácticamente la única diferencia ahora, es que los bancos tienen menos valores respaldados por “títulos hipotecarios” respecto a los que tuvieron en el 2008; y en su lugar, mucho más de otros activos que no valen nada, como p.e. los ‘bonos griegos’ y sus derivados. Pero veamos cómo se desarrollan las crisis bancarias; cuan cerca estamos de una nueva crisis financiera; y lo que esto significa para la gente común.
Si los fondos se secasen en Europa, lo mismo ocurrirá en otros lugares; y los bancos en el Mundo, que dependen de mercados líquidos de financiamiento extranjero para fondearse, sufrirán igualmente.
Si los mercados de crédito se congelan en el Exterior, lo mismo ocurrirá en otras partes del Mundo. Eso significa que la gente no podrá acceder a un préstamo para comprar su vivienda. La demanda de propiedad se contraerá severamente; el valor de las propiedades caerá (sin embargo aquí en el Perú ya hace un tiempo se ha pre-anunciado que en el 2012 la vivienda subirá en un 20%???; ¿quién, con qué base y por qué, se hacen este tipo de anuncios que los medios de comunicación publican sin análisis alguno?).
Sectores interesados en generar una elevación de precios en la propiedad (lo que está ocurriendo en el Perú), deben sincerar su narrativa. El punto de quiebre se está dando esta vez en los mercados de deuda de Europa y su reflejo en otros mercados no se dejará esperar.
Pero no sólo el crédito hipotecario se contraerá e incluso desaparecerá; los créditos personales se congelarán primero.
Todo esto significa que su negocio no será capaz de obtener préstamos, no se podrá obtener crédito hipotecario y su tarjeta de crédito dejará de funcionar.
Cuando los “Cajeros Automáticos” no expendan dinero suficiente, se deberá a una de dos causas: (i) Usted ya no tendrá dinero disponible; o (ii) simplemente el banco no tendrá como atenderlo aunque tenga Usted saldo en su cuenta.
De vuelta a la crisis bancaria global?... y cómo se inició la anterior en 2007?
Hoy los Bancos ya no se fondean de depósitos de los ahorristas; para ello es que existen hoy las sociedades de inversión. El fondeo para los Bancos, proviene de los mercados de deuda. Al igual que cuando el Banco presta dinero exige garantías (hipotecas), las instituciones financieras se exigen garantías entre sí. Lo hacen en todo tipo de formas extrañas con nombres raros como Repos, Swaps etc. [Repo es la sigla, en inglés, de pacto de recompra; un tipo de inversión donde una entidad financiera vende un activo (normalmente Letras, Bonos y Obligaciones del Estado etc…) y se compromete a, transcurrido un plazo establecido (menor de un año), recomprarlo a un precio fijado de antemano]
El punto es que los Bancos necesitan garantías para acceder a esas fuentes de financiación. Incluso los Bancos Centrales -llamados prestamistas de último instancia- requieren colaterales de los Bancos cuando les prestan dinero.
El problema con el uso generalizado de un determinado tipo de garantía, es que es aceptado, pero puede ser inaceptable un minuto después. Todo el mercado de Repo o de Swaps se puede congelar en un instante si el colateral utilizado es cuestionado. Fue así como ocurrió en el año 2008.
Compañías como Bear Stearns y Lehman Brothers utilizaban sus vastas cantidades de Obligaciones de Deuda Colateralizada (CDO, básicamente formados por hipotecas empaquetadas calificadas AAA-; en realidad muchas tenían menor calificación que la indicada), como colaterales para la financiación de acuerdos de Repo. Los Repos requieren activos registrados como colaterales calificados AAA+; por lo que cuando finalmente se exigieron esas calificaciones, Bear Stears y Lehman Brothers no pudieron repentinamente lograr el fondeo que necesitaban. Esa es la razón por la que fallaron: su incapacidad para proporcionar garantías aceptables para sus prestamistas.
Hoy vemos exactamente la misma historia, sólo que con bonos soberanos y sus derivados en lugar de CDOs; y Bancos Europeos en vez de Bancos de los Estados Unidos (aunque los principales como p.e. Golman Sach, también están en el mismo baile). Los bancos se encuentran debajo del nivel de garantías aceptables para actuar como prestamistas normales. El Banco Central Europeo, prestamista de última instancia de Europa, ha relajado sus normas para permitir el manejo de los derivados de la deuda soberana griega; incluso permite que sean usados como garantía a cambio de préstamos de emergencia. Sin esta flexibilidad, los bancos Europeos ya hubieran entrado en serias dificultades.
The Economist indica que algún tipo de colateral (clasificación c*ck) debe estar desarrollándose:
Con la financiación cada vez más difícil de conseguir, los bancos recurren a la industria financiera y actúan como Corredores: colocar y estacionar activos en los mercados de Repo o en el Banco Central para obtener dinero en efectivo. “No hay alternativa a los depósitos y al BCE”, dice un alto ejecutivo de un banco europeo. Pero ¿qué sucedería si los bancos ejecutan garantías para lograr préstamos a cambio?
El Gerente de UniCredit un Banco italiano, al parecer ha pedido al BCE aceptar una gama más amplia de garantías. Y un número creciente de bancos –dice- llevan a cabo lo que se conoce como Swaps de liquidez: bancos piden prestado un activo de un Asegurador o un Fondo de Cobertura (Hedge Fund) que el BCE acepta como garantía, a cambio de activos inelegibles, más por cierto, una jugosa comisión.
… Y así sigue el baile; ¿hasta cuándo?
Esto debe causar profunda preocupación. Pero más aún preocupa que fallara la subasta de bonos Alemanes, puesto que ello indica que las cosas se están congelando de la misma manera que ocurrió en el 2008. Y ya se nota la desesperación.
Este tipo de crisis colateral puede iniciar un rápido contagio en partes aparentemente no relacionadas del sistema financiero. Una vez que estos activos derivados no sean aceptables como garantía para la financiación, se vuelven menos interesantes de sostener porque se tornan inútiles. Así que los bancos los venderán para recaudar efectivo. Esto pone a activos, que solían ser considerados como seguros, bajo la inmensa presión de venta. Los banqueros que podrían haber aprendido la lección en 2008, sólo aprendieron equivocadamente, que los gobiernos se encargarán de rescatarlos. Pero esta vez –ya no alrededor de créditos hipotecarios empaquetados- sino alrededor de deudas soberanas y sus derivados; se plantea la gran cuestión: son los gobiernos que necesitarán ser rescatados simultáneamente con los bancos; es decir, los botes salvavidas lanzados en 2008 se están hundiendo.
Hasta aquí lo de Nickolai Hubble editado.
El Perú no es una isla inmune a esa crisis; decir lo contrario es esconderse a la realidad. Su buena situación actual le puede dar más tiempo, pero si la crisis en Europa dura como se prevé, llegará a todas partes y el
Perú no será una excepción.
¿Qué hacer?; sin demora:
1. Monitorear el fondeo de los bancos peruanos; su exposición a los mercados del dinero. Reducir o eliminar su exposición a la volatilidad de esos mercados.
2. Lo mismo para las colocaciones de los Fondos de las AFP’s, buscando a la vez, de promover opciones de inversión en el Perú en nuevos Proyectos de Inversión (p.e. en bio-combustibles) para coadyuvar al dinamismo de la economía peruana
3. Generar un verdadero desarrollo con inclusión multinivel y multisectorial; ya basta de especulaciones burocráticas; no hay tiempo para ello. Tampoco hay tiempo en disquisiciones de tendencias políticas; hay que actuar sin dilaciones, pensando en el desarrollo y la protección del futuro de todos los peruanos; y la preservación de la gobernabilidad sin ninguna otra base ideológica, que no sea el desarrollo inclusivo del país como conjunto en todo su territorio, con equilibrio y seguridad interna.
LBV